sábado, 5 octubre, 2024
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«No tenemos absolutamente nada que ver»

Sin menciones al abogado José Codazzi ni al senador oficialista Diego Pellegrini, ambos investigados en la causa Loan Peña, el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, dio este viernes la primera conferencia de prensa sobre la desaparición del niño desde que, hace ya dos semanas, anunció en su cuenta de X que la causa había dado «un gran paso» tras la versión del «accidente» instalada en la Justicia por Laudelina Peña, la tía de Loan, quien luego se desdijo. 

En la conferencia, anunciada de un momento al otro y sólo con medios correntinos, Valdés intentó desligar a su gobierno de cualquier responsabilidad en el caso, acusó a los «caranchos políticos» que buscan «desestabilizar» y volvió sobre las hipótesis del secuestro o la trata, luego de que él mismo haya dada por válida la versión del accidente. 

La conferencia sorprendió a todos, incluso a los medios provinciales. Anunciada a las 10 de la mañana y sin temario, los cronistas locales tuvieron que salir a las apuradas para cubrirla, según pudo saber Página/12. Los medios nacionales asentados en Goya y 9 de Julio, ciudades claves de la causa, no llegaron a la Casa de Gobierno. Así, Valdés se enfrentó sólo a la prensa local que pudo hacer cuatro preguntas que no incluyeron ni los tuits ni los nombres de Codazzi y Pellegrini, investigados por su presunta participación en el armado de la hipótesis del «accidente» para desviar la investigación. 

Valdés estuvo acompañado de su vicegobernador, Pedro Braillard Poccard, y del recientemente nombrado ministro de Seguridad, Alfredo Vallejos, que reemplazó a Buenaventura Duarte, desplazado en el marco de la causa. El gobernador anunció, primero, que además de la remoción de la cúpula policial concretada este jueves, también serán reemplazados diez comisarios generales de la policía y el jefe de la unidad regional de Goya, Roque Báez. 

Tras ello, se refirió directamente al caso para llenar de elogios a su propio accionar: «Con la responsabilidad que nos caracteriza, hemos puesto en funcionamiento toda la fuerza del Estado a disposición de la Justicia de Corrientes, hemos trabajado enormemente para encontrarlo, rastrillado con policías, voluntarios, drones y ayuda de provincias amigas para dar con Loan», dijo el gobernador que entonces retornó a una hipótesis que él mismo había desechado: «Encontramos pistas de que el menor ha sido sustraído o puede ser víctima de una red de trata, nosotros somos los que denunciamos la comisión de un delito federal en la provincia», sostuvo.

El relato que buscó articular Valdés en su conferencia es que la provincia agotó la investigación de las otras hipótesis, que las detenciones fueron oficiadas por la Justicia provincial y que, al encontrar indicios de un posible caso de trata, lo delegó a la Justicia federal. Claro que desde que el niño desapareció hasta que eso ocurrió, pasaron trece días: Y en el medio está la declaración de Laudelina Peña que instaló la versión del accidente, hipótesis que hubiera implicado, precisamente, que la causa dejara el fuero federal. Esta versión fue validada por los tuits del gobernador que, tras esa declaración de la mujer, publicó que Laudelina «habría narrado cómo fueron los hechos». 

Pero sobre eso no hubo ninguna palabra en la conferencia. Tampoco sobre Codazzi y Pellegrini, los dos vinculados a Valdés, acusados por Laudelina de haberla amenazado para que ella declarara esa versión de la que luego se desdijo ante la jueza federal Cristina Pozzer Penzo. Laudelina asegura que fueron ellos dos quienes la trasladaron a ella y a su hija hasta Corrientes para que declararan eso pasada la medianoche de un viernes, ante un fiscal provincial de turno y cuando la causa ya era instruida por la Justicia federal. 

Hacia ese fuero federal Valdés delegó toda la responsabilidad. «La justicia federal nos tiene que dar una respuesta«, dijo el hombre de la UCR, quien sostuvo que «no tenemos absolutamente nada que ver, como pretenden hacer ver algunos malintencionados y algunos caranchos políticos». Consultado por la prensa sobre esos «caranchos», el gobernador no dio ningún nombre pero dijo que «sabemos quiénes, dónde están y de dónde provienen» y que «sin dudas esto es un aprovechamiento político que pretende lastimar al gobierno en vista de las próximas elecciones». «No es admisible que tengamos miserias políticas tratando de desestabilizar«, aseguró. 

Hacia el final de la conferencia, que duró menos de quince minutos, el gobernador se refirió por su cuenta, y sin que nadie se lo preguntara, a la denuncia sobre su padre que se hizo pública este jueves en el marco de la marcha que atravesó la capital correntina para pedir la aparición de Loan. Allí, una mujer llamada Violeta denunció haber sido violada durante diez años por Manuel Valdés, padre del gobernador, y tener un hijo que él no reconoce, por el que existe una causa judicial de filiación en la Justicia correntina. 

«En el caso concreto de mi padre, es una causa que se está tramitando en los juzgados de Corrientes y que por la preservación del menor no voy a hacer ningún comentario», aseguró el gobernador, que en ese caso volvió a acusar a los «caranchos» por los «golpes bajos«. «Mi padre es un hombre que nunca ha tenido una denuncia penal a lo largo de su vida, tiene 87 años y misteriosamente aparece este tipo de denuncias que llaman poderosamente la atención», sostuvo.

Este viernes los senadores del PJ-Unión por la Patria correntino emitieron un comunicado en el que pidieron que el senador Pellegrini «preste testimonio y colaboración activa en la causa«, luego de que la jueza lo llame a declarar en carácter de testigo tras la acusación de Laudelina. El senador tiene fueros por su cargo, por lo que puede declarar por escrito. El pedido de los senadores se suma al que este jueves presentó el intendente de Paso de los Libres, Martín Ascúa, que reclamó directamente que la cámara trate el desafuero del senador, una de las principales espadas políticas de Valdés en la Legislatura provincial.  

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