domingo, 13 octubre, 2024
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Bodhana Sivanandan, un caso singular: a los 5 años empezó a aprender ajedrez como pasatiempo pandémico y a los 9 es un prodigio

Desde que aprendió ajedrez durante el bloqueo pandémico, Bodhana Sivanandan ganó un título europeo en este juego, se clasificó para el prestigioso torneo de la Olimpíada de Ajedrez de este año y se estableció como una de las mejores jugadoras de Inglaterra.

Ella también cumplió 9 años en marzo. Eso convierte a Bodhana, un prodigio del distrito londinense de Harrow, en la jugadora más joven en representar a Inglaterra a un nivel de élite en el ajedrez, y muy posiblemente la más joven en cualquier competición deportiva internacional.

“Estaba feliz y lista para jugar”, dijo Bodhana en una entrevista telefónica, dos días después de enterarse de que había sido seleccionada para la Olimpíada de este año, una competencia internacional considerada la versión de los Juegos Olímpicos en esta disciplina.

Bodhana Sivanandan durante una partida de exhibición en Trafalgar Square, LondresSAM BUSH – NYTNS

Esta niña de cuarto grado, que aprendió ajedrez hace cuatro años cuando tropezó con un tablero que su padre planeaba desechar, sabe exactamente lo que quiere lograr a futuro. “Estoy tratando de convertirme en el gran maestro más joven del mundo”, dijo, “y también en uno de los mejores jugadores de todos los tiempos”.

Tiene unos tres años para lograr su primer objetivo. La persona más joven en convertirse en gran maestro, la máxima distinción además de campeón del mundo, es Abhimanyu Mishra, un jugador estadounidense que tenía 12 años, 4 meses y 25 días cuando lo logró en 2021.

Los maestros internacionales han llamado a Bodhana un fenómeno desde que irrumpió en la escena del ajedrez competitivo ese mismo año. Venció a adultos por el primer premio femenino en el Campeonato Europeo de Ajedrez Blitz en diciembre pasado y actualmente ostenta el título de maestra femenina de la FIDE, título otorgado por la Federación Internacional de Ajedrez.

Los maestros internacionales han llamado a Bodhana un fenómeno desde que irrumpió en la escena del ajedrez competitivo SAM BUSH – NYTNS

Eso la ayudó a conseguir uno de los cinco lugares en el equipo de la Olimpiada inglesa “puramente por mérito”, dijo Malcolm Pein, director de ajedrez internacional de la Federación Inglesa de Ajedrez. Es, con diferencia, la jugadora más joven del equipo; Lan Yao, el segundo jugador más joven del equipo, tiene 23 años.

Fue pura casualidad lo que llevó a Bodhana a descubrir su talento. Cuando tenía cinco años, encontró un tablero al que le faltaba un peón que su padre, Sivanandan Velayutham, había estado planeando regalar. “Me interesaban las piezas y quería usarlas como juguetes”, dijo. “Me interesaban principalmente el caballo y la reina”.

Sivanandan Velayutham explicó que era un juego. “Dije, no es fácil, pero si aprendes, puedes jugar”, recordó. Era el primer año de la pandemia de coronavirus y Bodhana pasaba su tiempo viendo videos de YouTube y jugando ajedrez en línea. Pronto, venció a su padre y participó en torneos en línea.

La pequeña Bodhana Sivanandan jugando con el Primer Ministro británico, Rishi Sunak, hace unos meses

Si bien el talento de Bodhana puede ser extraordinario, su reciente descubrimiento del juego no lo es, dijo Pein. En los últimos años, el ajedrez ha experimentado un auge, en particular entre los jóvenes y las mujeres, impulsado por el aburrimiento pandémico y el éxito de Netflix “The Queen’s Gambit”, que sigue a un prodigio con problemas que navega en el mundo del ajedrez dominado por los hombres.

Después de eso, “apareció toda una nueva generación de niños increíblemente talentosos”, dijo Pein. El juego ofrece un atractivo adicional para los niños más pequeños: “Es muy enriquecedor poder vencer a un adulto en algo”, dijo. Y Bodhana empezó a hacer exactamente eso, después de que su padre la llevara a un festival de ajedrez de Londres y a su club de ajedrez local.

Bodhana Sivanandan, con su papá, Sivanandan VelayuthamSAM BUSH – NYTNS

“Se suponía que terminaría en una tienda benéfica”, dijo en una entrevista, refiriéndose al tablero de ajedrez. “¡Pero terminó siendo una buena causa para nuestro país!”

Hoy en día, Bodhana se entrena aproximadamente una hora cada día después de la escuela, con la ayuda de mentores y entrenadores de nivel de maestría internacional de la Federación de Ajedrez de Inglaterra. Le gusta especialmente estudiar las partidas del fallecido ajedrecista cubano José Raúl Capablanca; y explicó: “Me gusta el final”.

Pein la llamó una “jugadora posicional”, con una gran conciencia de la posición de las piezas entre sí en el tablero. “Ella no se precipita hacia ataques de sacrificio”, sostuvo, y elogió por su “comportamiento muy tranquilo y concentrado en el tablero y una increíble determinación de ganar”.

Bodhana Sivanandan, orgullosa con sus distinciones

Un maestro ajedrecista internacional, el inglés Lawrence Trent, espera que la niña de 9 años sea el mejor jugador del país. “La madurez de su juego, su toque sublime, es realmente impresionante”, señaló en las redes sociales el año pasado. A Bodhana le gusta cómo el ajedrez “activa tu cerebro”, dijo. ¿Su consejo para jugar bien? “Deberías seguir adelante y mantener la calma”.

El entusiasmo en torno a Bodhana atrajo a los jugadores al ChessFest en Trafalgar Square un domingo reciente, donde ella jugó partidas de exhibición, algunas simultáneamente. Ella fue una de los varios prodigios ingleses del ajedrez presentes, entre ellos Supratit Banerjee, de 10 años; Shreyas Royal, de 15, y Ethan Pang, de 9.

No es raro ver a niños compitiendo a altos niveles de ajedrez. El jugador más joven en competir en la Olimpíada de Ajedrez de 2022, según la Federación Internacional de Ajedrez, fue Randa Seder de Hebrón, en Cisjordania, que tenía ocho años en ese momento. Ese año, Rameshbabu Praggnanandhaa, un joven prodigio de la India de 16 años, derrotó a Magnus Carlsen, el campeón mundial, en un torneo online.

Por ahora, el padre de Bodhana quiere que ella disfrute del juego sin imponer expectativas. “Al fin y al cabo, ella es una niña, ¿verdad?”, manifestó. “No quiero marcar hitos. Déjela que establezca sus propios hitos”.

The New York Times

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