Este martes en Rosario se llevó a cabo un operativo inusual en pleno microcentro de la ciudad, luego de que un perro de tamaño mediano fuera encontrado muerto dentro de un automóvil.
Según la versión preliminar, el animal pasó varias horas dentro del vehículo sin ventilación, en medio de una jornada calurosa.
El cuerpo sin vida del pobre perro fue encontrado sobre la calle Corrientes al 600, a pocos metros de la intersección con Santa Fe, en el interior de un Peugeot 208 gris. El hallazgo se produjo alrededor de las 15:30, aunque testigos aseguran que el automóvil había estado estacionado en el mismo lugar desde las 8 de la mañana. La dueña del auto llegó al lugar y se descompensó al ver a su perro muerto.
Tras el aviso, agentes de la Brigada Motorizada llegaron al lugar y procedieron a custodiar el coche, mientras informaban a la Fiscalía Regional de Rosario para que evaluara la situación. La mujer, visiblemente afectada, rompió en llanto y se retiró a una zapatería cercana. Los uniformados, a la espera de que se recuperara, planeaban llevarla a la comisaría para que pudiera declarar.
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Al llegar, los oficiales encontraron las puertas del coche trabadas, pero no rompieron los cristales, ya que confirmaron que el perro ya había muerto. Todas las ventanillas estaban levantadas y las láminas polarizadas dificultaban la visibilidad desde el exterior.
El caso causó conmoción en la ciudad, y generó sospechas de un posible maltrato animal. Viviana Ponzo, integrante de una protectora local, expresó su indignación al ver al perro muerto y confirmó a Canal 3 que estaba dispuesta a realizar una denuncia penal.
Luego, alrededor de las 17:00, la sección ecológica de la policía se sumó al operativo. En un ambiente tenso, los agentes retiraron el cuerpo del animal y lo cargaron en la caja de su camioneta, envuelto en una bolsa roja, como parte de la investigación en curso.
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