En el marco de las celebraciones por parte del ministro Federico Sturzenegger por la reducción de las retenciones, este medio dialogó con Sergio Pedace, vicepresidente de la Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores (CAMyA), quien abordó temas cruciales para la industria del cuero vacuno en Argentina, el impacto ambiental y económico de estas medidas, además de los desafíos de seguridad rural.
La eliminación total de las retenciones al cuero bovino, celebrada por Federico Sturzenegger, marca un cambio significativo para las curtiembres. Sergio Pedace explicó que esta medida busca corregir distorsiones que afectaban la competitividad del sector. “Hace años que trabajamos desde la Mesa de las Carnes para que se eliminen las retenciones y se pueda exportar”, afirmó. Además, destacó que esta reducción de impuestos podría beneficiar también a los consumidores, al reducir los costos de producción y, eventualmente, los precios finales de la carne.
Desperdicio del cuero ante la caída de los precios
El sistema previo imponía cargas que dejaban a los frigoríficos con pocas opciones, llevando incluso al desperdicio del cuero. “Cuando el producto vale menos de lo que cuesta llevarlo a una fábrica, terminaba enterrándose, causando daño al medio ambiente”, comentó Pedace. Con la apertura de mercados y la eliminación de trabas burocráticas, se espera una mayor competitividad para toda la cadena productiva.
La apertura de mercados podría mejorar significativamente el sector del cuero
Históricamente, el cuero representaba una proporción significativa del valor del animal, sin embargo, en la actualidad su impacto es mínimo. “Antes, el precio del cuero podía ser hasta la mitad del valor del animal; hoy incide muy poco”, detalló el entrevistado. A pesar de esto, considera que la apertura de mercados podría generar una mejora progresiva en los ingresos del sector.
Sobre la crítica a la temporalidad de las rebajas, que solo estarán vigentes hasta el 30 de junio, Pedace respondió: “El Presidente ha dicho que los impuestos se reducirán en la medida en que se pueda achicar el Estado”. Aunque el plazo genera incertidumbre, confía en que, si la recaudación lo permite, estas políticas se extenderán.
En otro ámbito, el vicepresidente de la Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores resaltó el logro de la Policía de Buenos Aires al desarticular una banda que robaba camiones frigoríficos. “Estamos trabajando con la Policía Rural para combatir la delincuencia y garantizar la seguridad del sector”, afirmó. Aunque reconoce que queda mucho por hacer, señaló que estos esfuerzos son un paso en la dirección correcta.
La sequía y la falta de novillos son dos de los principales desafíos actuales. “Se necesita producir más ganado para abastecer tanto el mercado interno como el externo”, explicó Pedace. La oferta limitada y la alta demanda están generando tensiones en el sector.