La jueza penal Carolina Marín resolvió este viernes que Leandro Ezequiel Ramón -condenado en una causa por homicidio e imputado en otro expediente por robo triplemente agravado– permanezca en prisión preventiva hasta el juicio oral y público, que se hará con jurados populares.
La decisión llega tras un nuevo episodio de evasión: el miércoles, Ramón rompió la tobillera electrónica del arresto domiciliario que cumplía en Trelew y se dio a la fuga. Un día después se entregó en la comisaría Segunda, acompañado por su defensor particular, Danilo Sepúlveda.
Durante la audiencia de control, la fiscal Julieta Gamarra expuso detalles de la fuga que motivó el regresó de Ramón tras las rejas. Explicó que debía permanecer en su domicilio por orden judicial, monitoreado con un dispositivo electrónico, hasta enfrentar el juicio.
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Pero el miércoles cortó la pulsera, abandonó la vivienda y desapareció. El propio imputado, al declarar, explicó los motivos personales que –sostuvo– lo impulsaron a irse. Según se había informado en el momento de la fuga, había tenido una discusión con su pareja.
Sin embargo, la magistrada consideró que el solo hecho de violentar la medida cautelar demuestra “un riesgo concreto de fuga” y “falta de sujeción a la autoridad”.
Marín subrayó que, si bien el arresto domiciliario se había justificado originalmente, la reiteración de conductas evasivas impide confiar en que el imputado no volverá a intentarlo. Por eso ordenó su alojamiento en una unidad carcelaria hasta que se realice el juicio por jurados.