Luego de dos exitosas temporadas y coronarse como una de las series más vistas de la Argentina, El encargado, la ficción protagonizada por Guillermo Francella en la piel de Eliseo, vuelve a la pantalla chica con su tercera parte. Este viernes 19 de julio, la producción que capturó la atención de la audiencia, por su intrigante trama y humor negro, se reencuentra con su público con nuevos capítulos. Además de su narrativa que cautiva a sus fanáticos, otro protagonista emergió en la serie: el edificio que sirve como escenario principal de la trama.
Ubicado en la calle Arribeños al 1600, en el barrio de Belgrano, la particular propiedad se reconoce a simple vista. Pero, la gran pregunta que surge cuando se la puede ver es: ¿cómo logran las productoras de televisión y cine filmar en edificios de viviendas? ¿Qué acuerdos son necesarios para hacer esto posible?
Estos interrogantes se dan porque, a diferencia de otras series de televisión que se filman en interiores armados especialmente para la ficción, El encargado se apropió de una locación real en plena ciudad de Buenos Aires.
“Cuando se filma en un edificio, primero se debe diferenciar entre los espacios a utilizar. En los casos donde se graba en áreas de dominio particular, como departamentos o locales, es suficiente con el consentimiento del propietario”, explica Federico Chiesa, abogado especialista en propiedad horizontal del estudio Chiesa & Asociados.
Sin embargo, la situación difiere cuando se trata de áreas comunes del edificio, como el frente, el hall de entrada, los ascensores o los amenities. “En estos casos, el consorcio debe presentar la propuesta a la asamblea de propietarios, ya que cualquier decisión que afecte las áreas comunes debe ser aprobada por mayoría”, agrega el abogado.
Una vez obtenida la aprobación, se firma un contrato que detalla los derechos y obligaciones de todas las partes involucradas. “Aunque estos acuerdos suelen ser de naturaleza locativa onerosa, lo esencial es que su contenido esté claramente definido para evitar futuros conflictos”, aclara Chiesa. Y agrega que “en caso de desacuerdo, cualquier propietario que sienta vulnerados sus derechos puede recurrir a instancias legales, aunque este camino puede ser arduo y requiere la demostración de un daño concreto”.
Por su parte, Enrique Abatti, presidente de la Cámara de Propietarios de la República Argentina, añade un punto crucial a tener en cuenta en estos casos: “El consorcio es una persona jurídica, por lo tanto es la propietaria de todos los derechos, por lo que tiene derecho a cobrar por el uso de la imagen. Este pago es un acuerdo entre las partes, no hay nada establecido”.
Durante las dos primeras temporadas de El encargado, la filmación en el edificio de Belgrano incluyó el uso de la fachada, el garaje y algunos departamentos internos. Según vecinos, la terraza y la casa de Eliseo no existen en la realidad; estas escenas fueron grabadas en otros lugares. La filmación se realizó durante un mes por temporada, principalmente de noche o muy temprano en la mañana, para minimizar las molestias a los residentes.
Fuentes del barrio y vecinos consultados por LA NACION -que pidieron reservar su identidad- aseguraron que con el acuerdo económico del uso del espacio para la primera temporada (2022), que se realizó entre la productora de la serie y el consorcio, se lograron cubrir los gastos de las expensas de todos los vecinos durante un año. En el caso de la segunda temporada (2023) no se pudo precisar a este medio el alcance del beneficio percibido por el consorcio siendo, al menos, similar al anterior.
Para esta tercera temporada, la locación cambia. Eliseo de alejará del edificio que tanto conoce para asistir a una convención interamericana de encargados en Río de Janeiro, Brasil.
¿Cómo es el edificio dónde se filmó la serie?
Emplazado en una calle empedrada característica de la zona, entre las calles Virrey del Pino y José Hernández, el edificio llama la atención por su arquitectura tan moderna. Con más de 35 años de antigüedad, con soportes de hormigón en forma de V, la construcción de 10 pisos cuenta con departamentos que van desde los tres a los cinco ambientes con más de 150 metros cuadrados y poseen amplios balcones que dan a la calle (que fácilmente se pueden reconocer por los espectadores de la serie).
La zona en la que está emplazado el edificio de la serie, tiene una fuerte impronta residencial y fusiona casas lujosas con modernos edificios de departamentos. Siendo uno de los barrios más caros de la ciudad, defiende valores promedios de US$2916 por metro cuadrado y se ubica como el tercero más elevado (por detrás de Palermo y Puerto Madero). Sin embargo, por las características del lugar, las inmobiliarias con propiedades en los alrededores indican que los valores pueden ser aún mayores, superando los US$3000/m² y superando inclusive los US$4000/m² en algunos casos. Sin ir más lejos, a pocas cuadras de ahí comienza la zona conocida como “el Barrio Parque de Belgrano”, en el límite con Palermo.