Un dolor rutinario, pero que encendió una alarma. La inquietud se transmutó en la necesidad de ingresar a un quirófano para atender una complicación de salud de la hija de María Fernanda Callejón, que a sus diez años tuvo que ser operada raudamente.
La propia famosa reveló todo el episodio angustiante, en un posteo que realizó en sus redes sociales, en compañía de la pequeña Giovanna. Ahí, la cordobesa narró el origen de todo este trauma: «Tenía un dolor abdominal muy fuerte». Y así explicó que fueron a un hospital.
Inmediatamente le realizaron estudios por imágenes, por eso la hija de María Fernanda transmitió sus miedos en ese instante: «Tener una apendicitis era mi trauma. Yo tenía un miedo tremendo«. Tras esos exámenes, los médicos la sumieron a una internación inmediata en el nosocomio.
Giovanna relató el momento en que le comunicaron que debía ingresar al quirófano: «Para que no tenga miedo me dijeron que pensara qué regalo le iba a pedir a mis papás. Finalmente, vinieron y me dijeron que me tenían que operar«. Y confirmó el diagnóstico: «‘Tenés apendicitis retrocecal’, me explicaron».
OPERARON A LA HIJA DE MARÍA FERNANDA CALLEJÓN
Callejón explicó cómo la acompañó en ese trance tan complejo y describió su rol durante la intervención quirúrgica: «Teníamos que entrar uno de los dos, Giovanna eligió que sea yo, pero para ella volvió ese equipo fuerte, Ricky, Gio y yo, para ella«.
Conmovida, la actriz exteriorizó todas las emociones que la abordaron en esta adversidad: «No les puedo explicar la desesperación de una mamá ver a su hijo todo cableado y que se duerme, es una sensación espantosa. Pero es ahí donde tenés que mucha fe y saber que Dios existe, que ella es una niña llena de luz«.