Después del éxito de Llámame por tu nombre, los ojos de Hollywood y del público se posaron sobre sus protagonistas, Armie Hammer y Timothée Chalamet. Todo parecía indicar que ambos se convertirían en nuevas estrellas. Y aquello ocurrió, a medias. Mientras Chalamet avanzó con paso firme en su carrera, su compañero de elenco se convirtió en una especie de enemigo público cuando salieron a la luz sus tendencias al canibalismo y las denuncias de algunas de sus examantes«>salieron a la luz sus tendencias al canibalismo y las denuncias de algunas de sus examantes, que lo acusaban de violencia y abuso sexual. Este viernes, después de años de silencio, Hammer brindó su propia versión de los hechos.
El actor brindó una entrevista al programa Piers Morgan Uncensored que se emitirá el viernes por la noche y, según el extracto dado a conocer por Page Six, se refiere a cada una de las acusaciones que terminaron precipitando el fin de su carrera en la industria del entretenimiento.
Hammer fue acusado de canibalismo y agresión sexual por parte de múltiples parejas en 2021, pero en la entrevista aseguró que todas las relaciones que tuvo fueron consensuadas y que cualquier perversión que se haya visto representada en los mensajes personales que salieron a la luz en su momento fue parte de un juego de roles consensuado.
“¿Sabés lo que tenés que hacer para ser caníbal? Tenés que haber comido a alguien”, indicó Hammer. Luego, se refirió a su relación con Effie Angelova, quien lo acusó de agresión y abuso sexual. “Tuvimos una relación muy intensa”, indicó, y definió el vínculo entre ellos como “muy cargado de sexualidad, entre dos personas con inclinaciones y perversiones muy similares”. El romance entre ellos se desarrolló mientras él estaba casado con su ahora exesposa, Elizabeth Chambers, de quien se divorció en 2023.
“Cualquiera de las conversaciones que mantuvimos [con Angelova] dentro de esa relación, cuando las sacás de ese contexto y las ponés a plena luz del día, no se ven tan bien”, señaló. En 2021, Angelova acusó a Hammer de violarla “violentamente” y abusar de ella “mental, emocional y sexualmente” durante 2017. Otras mujeres se sumaron a la denuncia y afirmaron que el actor tenía fantasías caníbales y sadomasoquistas. Sin embargo, la Fiscalía del Condado de Los Ángeles confirmó el año pasado que Hammer no sería acusado de agresión sexual.
Con respecto a las acusaciones sobre su inclinación al sadomasoquismo, el actor indicó: “Cada persona tiene fantasías sexuales diferentes. Hay un espectro muy amplio de sexualidad, y a cada persona se le permite involucrarse con su propia sexualidad de la forma que se adapte a ella y a lo que haga”. Hammer, a su vez, señaló que fue Effie quien le “presentó” muchos de los fetiches que disfrutaba y aseguró: “Ella tenía más experiencia en esa área”.
En uno de los momentos más tensos de la charla, Hammer también pareció reconocer que las alusiones al canibalismo jugaron un papel en su relación. “Simplemente, nació de un deseo, de algo así como, ‘Te deseo tan completamente’ y ‘Te deseo tan totalmente’ que es casi como ‘Quiero comerte’”. También calificó el envío de mensajes sobre canibalismo a sus presuntas víctimas como una simple “fantasía divertida”.
Mientras hablaba con Morgan, Hammer también se refirió a algunas de las otras acusaciones de abuso sexual y emocional realizadas por Courtney Vucekovich, otra de sus ex. “No estoy de acuerdo con la naturaleza de nuestra relación y con cómo ella la describió”, dijo Hammer. “Lo que sí puedo decir es que dejé a gente que estaba herida y molesta. Ninguna de esas personas se sintió herida o molesta porque yo traspasé límites sexuales que no estaban interesados en explorar o probar”.
Una tercera mujer con la que compartió momentos íntimos, Paige Lorenze, lo acusó de marcarla con un cuchillo. En este caso, tampoco negó el hecho, pero afirmó que los hechos no ocurrieron como ella las contó. “No diría que es una marca. No… Había una situación de la que hablamos de antemano, que habíamos discutido, en la que, ya sabés, básicamente tomaría una punta pequeña y simplemente trazaría la letra ‘A’”, explicó Hammer, sin inmutarse. “Como la punta de un cuchillo pequeño… Quiero decir, ni siquiera había sangre en la situación. Era más como un rasguño. Es algo así como cuando las parejas se tatúan sus propias iniciales. No le dejé una marca permanente. Te garantizo que fue algo pequeño”, aseguró.
El actor admitió haber engañado a Chambers, la madre de sus hijos Harper y Ford, con varias mujeres. “Fui fiel durante mucho tiempo, específicamente durante los primeros siete años”, reconoció primero. Y luego, cuando el conductor le preguntó con cuántas personas había tenido amoríos, bromeó: “Probablemente, más de las que una persona promedio podría tener. No diría muchos cientos. No, ya sabés, diría suficientes”.
“Fue un momento oscuro y doloroso. También es algo que tengo que aceptar que es culpa mía. Tuve aventuras estando casado. Obviamente, no soy la primera persona en la historia de Hollywood que hace eso, pero lo hice, y es un comportamiento poco apropiado que debo asumir”, agregó.
Al recordar que tuvo que someterse a una evaluación psicológica mientras se llevaba a cabo el juicio por la custodia de sus hijos, el actor se emocionó hasta las lágrimas. “Durante el tiempo de la evaluación, solo me permitieron estar cerca de los niños bajo la supervisión de un terapeuta. Recuerdo que hubo un momento en el que mi hija se me acercó y me dijo: ‘Papá, necesito ir al baño’. Miré al terapeuta y no me permitieron llevarla. Tuvimos que conseguir que alguien más lo hiciera, porque no podía estar solo con mi hija en ese momento. Fue duro. Fue un momento oscuro para todos”.
Hammer también reconoció que sentía pánico de que sus hijos se enteraran de las acusaciones contra él. “Odio la idea de que la sexualidad de su padre o lo que sea, como quieran llamarlo, pueda ser utilizada en su contra por acosadores o niños malos en la escuela”, explicó. Y agregó: “No estoy diciendo tonterías. Estoy increíblemente agradecido por todo lo que pasó. Ahora puedo ser el padre que mis hijos merecen. Puedo darme el amor y la validación que buscaba de los demás. Puedo ser un buen ejemplo para mis hijos. También puedo ser un buen ejemplo para mis hijos de que a veces cometemos errores y a veces fracasamos”.
LA NACION